Como es habitual en estas fechas, Blizzard ha puesto en marcha sus Juegos de Verano de 2018. Se trata ya de la tercera edición del evento, que viene de nuevo cargado de skins y más contenido veraniego. En esta ocasión, nos desplazaremos a Busan, en Corea del Sur, para disfrutar de una nueva copa de Lúciobol.
La Copa Lúciobol
Por fin está de vuelta uno de los modos de juego más queridos por los seguidores de Overwatch, el Lúciobol. Se trata sin duda de uno de los más divertidos, con mecánicas que recuerdan mucho a otro videojuego, Rocket League. Está será la tercera ocasión que tendremos de jugar al fútbol con Lúcio desde su primera aparición en 2016. El año pasado disfrutamos del Estádio das Rãs, en Rio de Janeiro, pero esta vez toca visitar Busan.
Al igual que en la edición de 2017, volveremos a disfrutar del modo competitivo de Lúciobol, la Copa Lúciobol. El formato es el mismo que en las partidas competitivas de siempre. Subiremos o bajaremos en la clasificación específica de este nuevo modo según ganemos o perdamos. Solo los más habilidosos conseguirán el ansiado icono de Top 500 de Lúciobol, una medallita que nunca está de más.
Nuevas skins de los Juegos de Verano
Como no podía ser de otro modo, el evento viene cargado con cosméticos de todo tipo. Parece que el tema deportivo es el protagonista en esta ocasión. Así lo demuestran skins tan divertidas como “Fastball Zenyatta”, “Lacrosse Roadhog” o “Catcher Winston”, entre otras. Otra skin que se ha hecho muy popular es “Ana Cabana”, en la que la heroína se disfraza de abuela playera.
Si el año pasado no conseguisteis alguna de las skins del evento, no hay de qué preocuparse. En esta ocasión, y como viene siendo habitual últimamente, podréis conseguir todas las skins de los eventos de los Juegos de Verano anteriores en las cajas de botín o pagando tan solo 1000 monedas. A esto se le suma, por supuesto, los diferentes graffitis, iconos, gestos o jugadas destacadas. Tendréis hasta el día 30 de agosto para conseguirlo todo.
