Los monitores OLED de Sony Electronics reciben un Emmy

Dentro del marco de la 72ª edición de los Emmy organizado por la Academia Nacional de las Artes y las Ciencias de la Televisión (NATAS) y concretamente en la categoría de tecnología e ingeniería, los monitores de referencia OLED de Sony Electronics han sido galardonados con un importante premio Emmy.

Este premio recibido es un importante reconocimiento de la organización a la marca por su contribución e impacto en la calidad de masterización del sector, gracias a la tecnología OLED RGB de Sony, optimizada para el control creativo, técnico y de calidad, y el visionado de los clientes.

Sony sigue cosechando premios

En cualquier caso, Sony no es nueva en estos reconocimientos. En el pasado, Sony Electronics ya había recibido numerosos premios Emmy y, además, en 2012, su monitor de referencia OLED BVM-E250 ya había sido premiado con otro galardón. Así pues, éste es el segundo Emmy que recibe la serie BVM de monitores OLED, lo que evidentemente es un respaldo importante al trabajo realizado. De hecho, la empresa lo ha entendido como una auténtica consolidación de su liderazgo en tecnología de visualización profesional y el resultado del compromiso que ha tenido siempre la marca en lo referente a masterización de contenido.

El premio se entregará el 10 de octubre en el NAB Show

Estos premios Emmy a la tecnología y la ingeniería son otorgados por el desarrollo o la estandarización relacionados con tecnologías de ingeniería que constituyen importantes avances en referencia a métodos o tecnologías preexistentes, así como a innovaciones que conlleven cambios sustanciales.  El premio es otorgado por un comité de ingenieros altamente cualificados que trabajan en este campo y que valoran si procede, y en su caso a quién, otorgar el Emmy. El premio Emmy de 2020 en la categoría de tecnología e ingeniería será recibido por Sony en la ceremonia que se celebrará el 10 de octubre en el NAB Show de otoño.

Recordemos que Sony lanzó su monitor OLED BVM-X300 en 2015, siendo el primero en combinar resolución 4K, alto brillo, un pico de luminancia de 1000 nits y una relación de contraste de 1 000 000:1. Con él, se contribuyó a la adopción de la producción 4K HDR y definió el estándar para la masterización gracias a su combinación de resolución, alto rango dinámico y extensa gama de colores, lo que se materializaba en una reproducción excelente independientemente de que fueran zonas oscuras o con picos e iluminación. Y esta tecnología en aquel momento emergente, contribuyó de forma ostensible a transformar el sector.

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