Todo lo que toca la conectividad y las actualizaciones de sistema termina por quedar obsoleto antes de lo que pensamos. Y eso es lo que iremos viendo en numerosos equipos de música conectados, que verán como en el caso de Sonos, el fin de su soporte tras un tiempo en el mercado, tampoco especialmente longevo.
Eso es precisamente lo que hemos conocido ahora, que los altavoces de Sonos más antiguos van a dejar de recibir soporte y actualizaciones por parte de la marca dentro de unos meses. Algo que no es de extrañar viendo cómo funciona la industria de los dispositivos ultra conectados en los últimos años.
Fin de las actualizaciones para algunos altavoces Sonos
La firma ha anunciado que a partir del mes de mayo varios de sus dispositivos más veteranos no recibirán más actualizaciones de software. La firma ha asegurado que los siguientes dispositivos de la marca dejarán de recibir esas actualizaciones:
Zone Players, Connect y Connect originales: Amp (lanzado en 2006; incluye versiones vendidas hasta 2015), Play: 5 de primera generación (lanzado en 2009), CR200 (lanzado en 2009) y Bridge (lanzado en 2007) Por tanto en el mes de mayo, todos estos dispositivos dejarán de recibir nuevas versiones del software de Sonos y también dejarán de recibir nuevas funciones.
Sobre si los altavoces seguirán funcionando correctamente, en principio no habrá problema alguno para seguir utilizándolos. El problema vendrá más adelante, si como avisa Sonos algunas de sus tecnologías y socios modifican sus desarrollos y estos dejan de ser compatibles con los altavoces. Para ello ofrecen la posibilidad de intercambiar los altavoces por otros nuevos en una especie de plan renove con descuentos en la compra de nuevas generaciones de producto.
El problema para Sonos, que le ha llevado a cancelar las actualizaciones para estos altavoces, es que la capacidad técnica de estos modelos ha alcanzado su vida útil, y tanto los procesadores como la memoria han quedado obsoletos para seguir recibiendo estas actualizaciones. Tampoco podemos echarle nada en cara a Sonos, que ha estado actualizando sus altavoces con hasta diez años de antiguedad, lo que es todo un hito en el mercado.
